Pinear
La pasta con tomates secos es un plato rápido y sabroso perfecto para una cena acogedora en casa. Con su salsa cremosa, explosiones de sabor de tomates secos y espinacas frescas, esta receta de 30 minutos es tanto sencilla como elegante, convirtiéndola en una opción ideal para cenas entre semana o reuniones informales.
Un Plato Digno de Restaurante en Tu Mesa
Me enamoré de esta pasta la primera vez que la preparé. La forma en que los tomates secos ácidos complementan la cremosa salsa crea una profundidad de sabor increíble. Además, se prepara muy rápido con ingredientes que normalmente tengo a mano, lo que la hace ideal para esas noches cuando quiero algo especial pero no tengo horas para pasar en la cocina.
Lo Que Necesitarás
- Pasta: 340 gramos de rigatoni o tu forma favorita, cocida al dente para la mejor textura.
- Mantequilla: 2 cucharadas para saltear y crear una base cremosa.
- Harina: 1 cucharada, mezclada con la mantequilla para espesar la salsa.
- Ajo: 3 dientes, picados finamente para un sabor intenso.
- Vino blanco: 120 ml de un vino seco como verdejo o albariño. Puedes usar caldo de pollo si lo prefieres.
- Mostaza de Dijon: 1/2 cucharadita para profundidad de sabor sin dominar.
- Zumo de limón: 1 cucharada para añadir una nota ácida y fresca al plato.
- Condimento italiano: 1 cucharadita para una mezcla fragante de hierbas.
- Tomates secos: 120 ml, cortados en juliana para un sabor concentrado y ácido.
- Nata para cocinar: 180 ml para una salsa sedosa y decadente.
- Queso parmesano: 120 ml, recién rallado para el mejor derretido y sabor.
- Espinacas: 2 tazas de hojas de espinaca fresca para equilibrar la riqueza.
- Sal y pimienta: Para sazonar la salsa al gusto.
Vamos a Prepararla Juntos
- Cocina la Pasta
- Hierve 340 gramos de pasta en agua con sal según las instrucciones del paquete. Escurre y reserva.
- Prepara la Salsa
- Derrite 2 cucharadas de mantequilla en una sartén a fuego medio. Añade 1 cucharada de harina y el ajo picado, removiendo hasta que esté fragante, aproximadamente 1 minuto.
- Crea la Base de Sabor
- Incorpora 120 ml de vino blanco, 1/2 cucharadita de mostaza Dijon, 1 cucharada de zumo de limón y 1 cucharadita de condimento italiano. Deja que la mezcla se reduzca a la mitad, unos 3 minutos.
- Incorpora la Nata
- Añade 180 ml de nata para cocinar y 120 ml de tomates secos en juliana. Cocina durante 5 minutos, removiendo de vez en cuando, hasta que la salsa empiece a espesarse.
- Finaliza el Plato
- Añade 120 ml de parmesano recién rallado y 2 tazas de espinacas frescas. Remueve hasta que las espinacas se marchiten. Mezcla la pasta cocida con la salsa, asegurándote de que quede bien cubierta. Sazona con sal y pimienta al gusto.
Trucos Para Que Quede Perfecta
Después de preparar esta pasta muchas veces, he aprendido algunos trucos importantes. Siempre guarda una taza del agua de cocción antes de escurrir la pasta, puede ayudar a diluir la salsa si hace falta. Rallar tu propio parmesano marca una gran diferencia en cómo se derrite suavemente en la salsa. Y no te saltes ese toque de mostaza Dijon, añade una sutil profundidad que realmente eleva todo el plato.
Manteniéndola Fresca
Aunque esta pasta es mejor disfrutarla recién hecha, se conserva bien en la nevera durante unos días. Al recalentarla, añado un chorrito de nata o agua para recuperar esa textura sedosa de la salsa. Solo caliéntala suavemente a fuego bajo, removiendo de vez en cuando para mantener la salsa suave y cremosa.
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Preguntas Frecuentes
- → ¿Qué tipo de tomates secos debo usar?
- Puedes optar por tomates secos al natural o en aceite. Si usas los de aceite, es mejor escurrirlos bien antes de usarlos.
- → ¿Puedo reemplazar el vino blanco?
- Claro, puedes sustituir el vino blanco por caldo de pollo para una opción sin alcohol que mantiene el buen sabor.
- → ¿Por qué guardar el agua de la pasta?
- El agua de la pasta ayuda a ajustar la textura de la salsa si está muy espesa y deja un acabado cremoso.
- → ¿Por qué cocinar la pasta al dente?
- La pasta al dente conserva su textura y no se pondrá blanda al mezclarla con la salsa caliente.
- → ¿Puedo cambiar la crema?
- La crema para batir o crema espesa es la que mejor funciona, ya que da la textura más rica y no se corta al calentarla.