Delicioso Penne con Chicharos y Tocino

La perfecta combinación de confort y sofisticación se une en este cremoso plato de macarrones. Cada bocado ofrece pasta tierna bañada en una sedosa salsa de nata, realzada por dulces guisantes y trocitos crujientes de panceta - una combinación que transforma ingredientes sencillos en algo verdaderamente memorable.

Descubrí esta receta durante mis días en la escuela de cocina, y desde entonces es un básico en mi cocina. La clave está en dejar que la panceta se dore lentamente, creando una base sabrosa que eleva todo el plato.

Ingredientes Esenciales

• Macarrones: Elige pasta de molde de bronce para una textura más rugosa que ayude a que la salsa se adhiera mejor
• Panceta: Debe ser gruesa - aporta mejor textura y más sabor que el bacon normal
• Guisantes Congelados: Su dulzura natural equilibra la sal de la panceta; mantienen mejor su forma que los de lata
• Cebolla: Busca cebollas firmes y pesadas sin partes blandas para un sabor más dulce
• Nata para Cocinar: Su alto contenido en grasa crea una salsa sedosa que no se corta
• Agua de Cocción: El agua con almidón es esencial para conseguir la consistencia perfecta
• Queso Manchego Curado (Opcional): Elige un queso bien curado para mejor sabor y fundido

Instrucciones Detalladas

Preparación de la Panceta (10-12 minutos):

Corta la panceta en trozos de 1 cm para una cocción uniforme. Comienza en sartén fría y calienta gradualmente para derretir la grasa. Cocina hasta que esté crujiente pero no quemada, removiendo ocasionalmente. Retira con espumadera, dejando la grasa en la sartén.

Preparación de la Base (8-10 minutos):

Reduce el fuego a medio. Añade la cebolla finamente picada a la grasa de panceta. Cocina hasta que esté transparente y ligeramente caramelizada. Sazona con pimienta negra (la sal después por la salinidad de la panceta).

Cocción de la Pasta (10-12 minutos):

Hierve abundante agua en una olla grande. Sala generosamente - el agua debe saber como el mar. Añade los macarrones y programa 2 minutos menos que las instrucciones del paquete. Añade los guisantes en los últimos 3 minutos. Reserva 1 taza de agua antes de escurrir.

Elaboración de la Salsa (5-7 minutos):

Vuelve a poner la sartén con cebolla a fuego medio. Vierte la nata, removiendo constantemente. Deja reducir hasta que espese ligeramente. Añade la mitad del agua reservada, mezclando bien. Sazona con pimienta y prueba antes de añadir sal.

Montaje Final (3-5 minutos):

Añade la pasta y guisantes escurridos a la sartén. Incorpora los trocitos de panceta crujiente. Remueve suavemente hasta que la pasta esté bien cubierta. Añade más agua si es necesario para la consistencia deseada. Deja reposar 1 minuto para que absorba los sabores.

Guardar

Creciendo en un hogar español, aprendí que el agua de cocción de la pasta es oro líquido. La semana pasada estaba enseñando esta receta a mi sobrina, y ver su cara iluminarse cuando vio cómo el agua con almidón transformaba la salsa fue inolvidable. Son estos pequeños secretos culinarios los que marcan la diferencia.

Control de Temperatura

Controlar el calor es crucial durante toda la receta. Si la sartén está demasiado caliente al añadir la nata, la salsa puede cortarse. Siempre retiro la sartén del fuego brevemente antes de añadir la nata, luego la vuelvo a poner a fuego medio-bajo para crear esa textura sedosa perfecta.

Eligiendo la Pasta

Aunque los macarrones son tradicionales, he experimentado con varias formas. Los tubos más grandes de los rigatoni crean bocados más contundentes, mientras que las conchas pequeñas forman cuencos que acunan perfectamente los guisantes. La clave es elegir una forma que pueda aguantar la salsa y los complementos.

Variaciones Estacionales

En primavera, me encanta añadir guisantes frescos cuando hay disponibles - solo necesitan 2 minutos en el agua de la pasta. Durante el verano, a veces añado tomates cherry partidos al final para dar toques de sabor fresco. Las versiones de invierno pueden incluir una pizca de nuez moscada en la salsa de nata para dar calidez.

Consejos de Chef Profesional

* Nunca enjuagues la pasta - el almidón ayuda a que la salsa se adhiera
* Corta la panceta cuando está ligeramente congelada para cortes más limpios
* Mantén la nata a temperatura ambiente para una salsa más suave
* Para más riqueza, termina con un chorrito de aceite de oliva virgen extra

Este plato representa lo que más me gusta de la cocina mediterránea - ingredientes sencillos transformados mediante técnica cuidadosa en algo extraordinario. Ya sea servido para una cena familiar rápida o una velada elegante con amigos, nunca falla en traer sonrisas a la mesa.

Guardar

Preguntas frecuentes

→ Por qué agregar los chicharos a mitad de la cocción de la pasta

Si los agregas a mitad de la cocción no se pasarán de cocidos ni se volverán aguados. Además, ahorras usando la misma olla.

→ Por qué cocinar la pasta un minuto menos de lo que indica el paquete

Así evitas que se pase de cocida y logras una textura perfecta cuando se mezcla con la salsa caliente.

→ Se puede preparar este plato con anticipación

Es mejor disfrutarlo de inmediato, ya que la pasta sigue cocinándose y se vuelve más blanda mientras espera.

→ Cómo saber si se necesita más crema

Si notas la pasta un poco seca después de mezclar todo, añade más crema hasta que esté cubierta de manera ligera, pero sin exceso de líquido.

→ Por qué cortar la cebolla en trozos pequeños

Así se integran mejor en el plato y logras que se cocinen rápido junto con el tocino.