
El pollo relleno de pimientos asados, espinaca y mozzarella es una forma deliciosa de convertir unas pechugas normales en una obra maestra para la cena. Con un jugoso relleno de pimientos asados, espinaca fresca y cremoso queso mozzarella, este plato está lleno de sabor pero es bastante sencillo para preparar cualquier día de la semana.
Una Cena Espectacular
Encontré esta receta cuando buscaba formas de hacer más interesantes las pechugas de pollo y se ha convertido en uno de mis platos más solicitados. La mezcla de pimientos dulces asados, espinaca con ajo y ese queso mozzarella derretido a la perfección crea algo verdaderamente especial. Lo que más me gusta es lo impresionante que se ve aunque sea tan fácil de preparar.
Ingredientes Necesarios
- Pechugas de Pollo: De tamaño mediano, deshuesadas y sin piel, con un corte horizontal aproximadamente hasta 2/3 de la pieza.
- Pimientos del Piquillo: En rodajas para un sabor dulce y ahumado.
- Espinacas Frescas: Salteadas hasta que se marchiten para un relleno vibrante.
- Queso Mozzarella: Rebanadas gruesas de mozzarella fresca para lograr un centro cremoso.
- Ajo: Picado fresco para un toque aromático y sabroso.
- Aceite de Oliva y Mantequilla: Para saltear y dorar.
- Harina: Ligeramente espolvoreada para conseguir un dorado crujiente.
- Sal y Pimienta: Para sazonar y realzar todos los sabores.
Vamos a Cocinarlo Juntos
- Preparación del Pollo
- Seca las pechugas con papel y haz un corte horizontal. Sazónalas con sal y pimienta, luego pásalas por harina, sacudiendo el exceso.
- Dorar en Sartén
- Calienta aceite y mantequilla en una sartén. Dora el pollo por ambos lados hasta que quede doradito para sellar el relleno.
- Preparar el Relleno
- Saltea los pimientos y las espinacas en aceite. Añade el ajo y cocina por 1 minuto hasta que suelte su aroma. Sazona al gusto y deja enfriar un poco.
- Rellenar y Hornear
- Rellena cada pechuga con la mezcla preparada y una rebanada de mozzarella. Asegura con palillos si hace falta, y hornea a 190°C durante 20-25 minutos, hasta que la temperatura interna llegue a 74°C.
Trucos Para Perfeccionarlo
Después de muchos intentos para perfeccionar este plato, he aprendido algunos trucos importantes. Siempre seca bien el pollo antes de sazonarlo, marca una gran diferencia para conseguir ese bonito dorado. Vale la pena buscar mozzarella fresca, se derrite mucho mejor que la rallada. Y esos palillos son salvavidas para mantener todo en su sitio mientras se cocina.
Cómo Servir Tu Creación
Me encanta servir este pollo con arroz esponjoso que absorbe todos esos jugos tan ricos o con verduras asadas para una opción más ligera. La forma en que la mozzarella se derrama cuando lo cortas nunca deja de impresionar a mis invitados. Es uno de esos platos que hace que cualquier cena parezca especial, incluso en una noche normal entre semana.

Preguntas Frecuentes
- → ¿Para qué sirve empanizar el pollo en harina?
- El recubrimiento de harina crea un dorado crujiente al sellar y conserva los jugos del pollo al cocinarse.
- → ¿Por qué sellar antes de hornear?
- Sellar le da una costra dorada con mucho sabor y encierra los jugos antes de cocinarlo por completo en el horno.
- → ¿Cómo sé que el pollo está listo?
- Usa un termómetro de carne para confirmar que la temperatura interna llegue a 165°F, lo cual suele tomar entre 20 y 25 minutos de horneado.
- → ¿Puedo usar otro queso?
- Aunque la mozzarella fresca derrite mejor y tiene un gran sabor, otros quesos que se derritan podrían funcionar. Asegúrate de que tengan un grosor similar.
- → ¿Por qué quitar los palillos antes de servir?
- Los palillos solo sostienen el pollo mientras se cocina. Quítalos antes de comer para evitar accidentes.