
La perfecta combinación de queso manchego y chorizo ibérico envueltos en unos bollos tiernos y esponjosos. Cada bocado ofrece un equilibrio perfecto entre el sabor intenso del queso y el chorizo, todo envuelto en una masa suave que se deshace en la boca. Sin complicaciones de amasar o cortar - se preparan fácilmente con un bol y una cuchara.
El domingo pasado preparé estos bollos para un brunch familiar y mi sobrino declaró que estaban "mejores que los del restaurante". El secreto está en la mantequilla y la leche agria muy frías, y en no trabajar demasiado la masa. Esos pequeños trozos de mantequilla crean las capas más deliciosas.
Ingredientes Esenciales
- Chorizo Ibérico: Elige chorizo de calidad con especias visibles - da sabor a todo el bollo
- Queso Manchego: Queso curado aporta más sabor. Evita el queso rallado comercial
- Leche Agria: La auténtica leche agria da ternura. Puedes sustituir por leche con limón
- Mantequilla Fría: Cuanto más fría mejor - la congelo 15 minutos antes
- Harina Normal: La harina sin blanquear da mejor textura. Mide con cuidado
- Levadura en Polvo: Verifica la fecha - debe estar fresca para un buen leudado
- Cebollino: Aporta frescura que equilibra la riqueza

Instrucciones Detalladas
- Paso 1:
- Empieza dorando el chorizo en sartén fría - así se extrae mejor la grasa y se dora mejor. Desmenúzalo mientras se cocina
- Paso 2:
- Mientras se enfría el chorizo, corta la mantequilla en cubos y congélala. La mantequilla fría es crucial
- Paso 3:
- Coloca la rejilla del horno en el centro y precalienta bien - un horno caliente ayuda al leudado
- Paso 4:
- Mezcla bien los ingredientes secos para distribuir la levadura y condimentos
- Paso 5:
- Incorpora la mantequilla con movimientos cortos. Para cuando parezca gravilla gruesa
- Paso 6:
- Añade el queso suavemente, cubriendo cada trozo con harina
- Paso 7:
- Incorpora el chorizo frío, evitando grumos grandes
- Paso 8:
- Vierte la leche agria fría y esparce el cebollino
- Paso 9:
- Mezcla con cuchara de madera doblando la masa, no revolviendo
- Paso 10:
- Usa una taza medidora engrasada para formar porciones generosas, dejando espacio entre ellas
- Paso 11:
- Deja las superficies irregulares - se dorarán hermosamente
- Paso 12:
- Hornea hasta dorar, girando la bandeja a mitad de cocción
Más Allá del Desayuno
Estos versátiles bollos brillan en cualquier comida. Rellénalos con huevos para bocadillos de desayuno, sírvelos con fabada o cocido, o disfrútalos como aperitivo.
Preparación Anticipada
La masa sin hornear se puede porcionar y congelar en una bandeja, luego transferir a una bolsa. Hornea directamente del congelador, añadiendo unos minutos extra.

Creciendo en Asturias, mi abuela me enseñó que los bollos nunca deben apresurarse. Solía decir, "La masa sabe cuando tienes prisa", y estos bollos lo demuestran cada vez.
Estos bollos se han convertido en mi receta más solicitada para reuniones familiares. Hay algo mágico en cómo el queso crea bordes crujientes mientras el centro permanece perfectamente tierno. Son la prueba de que a veces las recetas más sencillas traen la mayor alegría a la mesa.
Preguntas Frecuentes
- → ¿Puedo preparar estas galletas con antelación?
- Puedes hacer la masa y cortar las galletas hasta 24 horas antes. Guárdalas tapadas en la nevera hasta que las hornees.
- → ¿Por qué es importante que la mantequilla esté fría?
- La mantequilla fría forma bolsitas de vapor al hornearse, lo que da como resultado galletas superflojas y tiernas.
- → ¿Puedes congelar estas galletas?
- Sí, congela las galletas sin hornear por hasta 3 meses. Hornéalas directamente del congelador, añadiendo 2-3 minutos más al tiempo de horneado.
- → ¿Se puede usar otro tipo de queso?
- Claro, cualquier queso firme funciona. Prueba Oaxaca, Manchego o Gouda para nuevas combinaciones.
- → ¿Y si no tengo suero de leche?
- Mezcla una taza de leche normal con una cucharada de jugo de limón, deja reposar 5 minutos antes de usar.