
En cada temporada navideña, estas Delicias de Menta traen magia a mi cocina. Su textura delicada se deshace literalmente en la boca mientras el dulce glaseado de menta y los trocitos de caramelo crean el bocado festivo perfecto. Cuando las preparo, el aroma mentolado llena mi casa y me recuerda a los bastones de caramelo y las memorias navideñas.
Todo lo que Necesitas
- Mantequilla: Uso sin sal para controlar el sabor a mi gusto.
- Azúcar glass: Da a estas galletas una ternura increíble.
- Esencia de menta: Justo la cantidad para ese toque mentolado ideal.
- Harina: Tamizada para lograr la textura más ligera.
- Maicena: Mi truco para esa cualidad de derretirse en la boca.
- Más mantequilla: Crea ese topping esponjoso como una nube.
- Leche: Solo un chorrito para la consistencia perfecta al untar.
- Más menta: Intensifica ese sabor navideño.
- Azúcar glass: Hace que el glaseado quede suave como la seda.
- Caramelos de menta triturados: Añaden brillo y crujido.
Empecemos a Hornear
- Mezcla la Masa
- Bate la mantequilla y el azúcar hasta que quede ligera y esponjosa durante unos 3 a 4 minutos. Añade un poco de esencia de menta para ese sabor característico.
- Combina los Ingredientes Secos
- Mezcla la harina y la maicena, luego incorpóralas suavemente a la mezcla húmeda para formar una masa blanda.
- Enfría y Da Forma
- Refrigera la masa brevemente, luego forma bolitas de unos dos centímetros listas para hornear.
Al Horno
- Hornea las Galletas
- Precalienta el horno a 180°C y hornea las bolitas de masa enfriadas durante 9 a 11 minutos hasta que las bases estén ligeramente doradas.
- Tiempo de Enfriado
- Deja que las galletas se enfríen en la bandeja unos minutos, luego pásalas a una rejilla para que se enfríen completamente.
Creando la Cobertura
- Prepara el Glaseado
- Bate la mantequilla hasta que esté esponjosa, luego añade poco a poco la leche, la esencia de menta y el azúcar glass hasta que quede suave. Agrega una gotita de colorante rosa para un toque festivo si quieres.
- Glasea y Decora
- Extiende generosamente el glaseado sobre cada galleta enfriada y cubre con caramelos de menta triturados para darles brillo y crujido.
Hazlas a Tu Manera
A veces cambio el glaseado por un simple baño de azúcar o pruebo diferentes esencias para variar. Durante las fiestas me gusta cortarlas en formas navideñas, pero esos círculos clásicos tienen un lugar especial en mi corazón. Los trocitos de caramelo de menta por encima no solo son bonitos, también añaden una textura maravillosa y un extra de dulzura mentolada.
Manteniéndolas Frescas
Estas galletas se conservan perfectamente en un recipiente hermético durante varios días. A menudo hago las galletas con antelación y las glaseo más cerca del momento de servirlas. Si planeas con mucha anticipación, las galletas sin glasear se congelan perfectamente hasta por tres meses, solo añade el glaseado después de descongelarlas.
Mis Mejores Consejos
- Ajusta el glaseado con azúcar o leche poco a poco para lograr la consistencia perfecta para untar.
- Enfría la masa brevemente para una mejor forma y textura.
- Planifica haciendo las galletas un par de días antes para permitir que los sabores se desarrollen.
- Siempre haz más, ¡desaparecen rápido!

Preguntas Frecuentes
- → ¿Por qué se llaman galletas que se deshacen?
Su alto contenido de mantequilla y maicena las hace increíblemente tiernas y literalmente se deshacen en tu boca. Maneja la masa con cuidado para mantener esta textura.
- → ¿Puedo hacerlas con anticipación?
Puedes preparar y congelar las galletas sin glasear hasta por 3 meses. Añade el glaseado y los trozos de caramelo justo antes de servir para mejores resultados.
- → ¿Por qué necesito enfriar la masa?
Enfriarla ayuda a que la mantequilla se endurezca, facilitando el manejo de la masa y evitando que las galletas se extiendan demasiado durante el horneado.
- → ¿Puedo usar otros extractos?
Puedes cambiar por otros sabores como vainilla o almendra, pero la menta les da su característico sabor navideño.
- → ¿Cómo guardo estas galletas?
Guárdalas en un recipiente hermético. Se mantendrán frescas unos 5 días a temperatura ambiente, aunque la cobertura de caramelo puede ablandarse con el tiempo.