01 -
Prende el horno a 220°C y engrasa una bandeja para hornear con spray antiadherente.
02 -
Fríe la carne molida, elimina el exceso de grasa, mézclala con el sazonador de tacos y deja enfriar.
03 -
Parte la masa de pizza a lo largo en dos, luego corta cada parte en 5 rectángulos para tener 10 piezas en total.
04 -
Coloca un poco de carne sazonada (ya fría) y un trozo de queso al centro de cada rectángulo.
05 -
Envuelve la masa cubriendo el relleno y sella bien los bordes para formar los palitos.
06 -
Mezcla la mantequilla derretida con el ajo en polvo y el perejil; con una brocha, úntalo sobre los palitos.
07 -
Hornea durante 10-12 minutos hasta que se vean doraditos. Disfrútalos calientes.