01 -
Comienza tomando la leche Lactaid y los huevos y déjalos a temperatura ambiente durante al menos 30 minutos. Corta la mantequilla en cubos pequeños y deja que se ablande hasta que puedas presionarla ligeramente con el dedo.
02 -
Bate la mantequilla por un minuto para suavizarla. Luego añade los dos tipos de azúcar y bate hasta obtener una mezcla ligera y esponjosa, aproximadamente 3-4 minutos.
03 -
Añade los huevos uno a la vez, batiendo bien después de cada adición. Luego, lentamente, mezcla la leche Lactaid mientras raspas los lados del recipiente para asegurar una mezcla uniforme.
04 -
En otro bol, mezcla la harina, bicarbonato de sodio y la sal. Integra esta mezcla seca en tres partes al recipiente principal, mezclando solo hasta que no veas restos de harina. Luego, incorpora las chispas de chocolate con una espátula.
05 -
Cubre la masa con papel film y colócala en la nevera durante al menos 2 horas para enfriar. Si puedes, déjala toda la noche para mejores resultados.
06 -
Forma pequeñas porciones de masa y colócalas sobre una bandeja con papel de hornear. Deja suficiente espacio entre cada galleta. Hornea a 180ºC durante 11-13 minutos o hasta que los bordes estén dorados y el centro ligeramente suave.
07 -
Deja enfriar las galletas en la bandeja por 5 minutos antes de transferirlas a una rejilla. Una vez completamente frías, guárdalas en un recipiente hermético con un trozo de pan para mantenerlas frescas.