01 -
En un bol, mezcla las yemas de huevo con el vinagre o jugo de limón, y añade una pizca de sal. Si lo deseas, incorpora la mostaza para un toque extra de sabor.
02 -
Mientras bates constantemente, agrega el aceite poco a poco en forma de hilo fino. Continúa batiendo hasta que la mezcla se vuelva espesa y cremosa. Esto puede tardar unos minutos.
03 -
Prueba la emulsión y ajusta la sal si es necesario. Sirve inmediatamente o almacénala en un recipiente hermético en el refrigerador por hasta 3 días.