01 -
Cubre un molde cuadrado de 20x20 cm con papel encerado. Asegúrate de cubrir el fondo y los bordes.
02 -
Combina el chocolate blanco, leche condensada, mantequilla y la esencia de menta. Lleva al microondas por 30 segundos. Revuelve y repite hasta que todo esté derretido.
03 -
Aparta 1/2 taza de la mezcla en un recipiente y agrega el colorante rojo. Luego, reserva otro 1/2 taza y añade el colorante verde. Mezcla cada uno rápidamente.
04 -
Distribuye cucharadas alternando los colores sobre el molde preparado. Usa un cuchillo para crear remolinos. Si quieres, espolvorea las chispas decorativas.
05 -
Deja enfriar en el refrigerador al menos 2 horas hasta que esté firme.