01 -
Adereza las chuletas de cerdo con una pizca de sal y pimienta, asegurándote de cubrir ambos lados para realzar su sabor natural.
02 -
Derrite el aceite junto con la mantequilla en una sartén a fuego medio, y sella las chuletas por ambos lados hasta que adquieran un tono dorado apetitoso.
03 -
Retira las chuletas de la sartén y resérvalas en un plato.
04 -
En la misma sartén, sofríe el ajo picado durante aproximadamente un minuto, cuidando que no se queme para preservar su suave sabor.
05 -
Añade el jugo de piña, el rollito de canela, la azúcar morena o miel, y los clavos de olor, permitiendo que todos los ingredientes se mezclen bien y liberen sus aromas.
06 -
Deja que la salsa cocine a fuego bajo por unos minutos, permitiendo que espese ligeramente.
07 -
Vuelve a introducir las chuletas en la sartén, bañándolas generosamente con la salsa de piña.
08 -
Cocina las chuletas en la salsa por ambos lados durante unos 5 minutos, observando cómo la salsa toma una consistencia caramelizada.
09 -
Sirve las chuletas calientes, acompañadas de vegetales, papas o arroz para un plato completo y sabroso.